En nuestro recorrido por Ourense nos
encontramos con una maravilla que nos impresionó. Se trata de la
iglesia de Santa Comba de Bande, un templo visigodo de finales del
siglo VII. Es la más antigua de Galicia y el primer edificio en ser
declarado monumento nacional en toda la provincia. Todo parece
indicar que era parte de un pequeño monasterio por las
características que comparte con otras de su época, de las que en
Galicia ya no queda ninguna.
Su planta de cruz griega no posee los
dos brazos simétricos. A ambos lados del transepto se abren dos
cámaras solo accesibles desde el interior de la iglesia, lo que
indica que eran para el servicio de los monjes. Su sencillez y su
espacio muy compartimentado dan al lugar un aire místico. Un arco de
herradura separa el altar presidido por un ara romana. También
puede verse un miliario reconvertido en pila bautismal cerca de la
entrada a la iglesia. Un sarcófago donde estuvieron los restos de
San Torcuato, uno de los primeros discípulos del ápostol Santiago,
traídos desde Guadix al comenzar la invasión musulmana de la
península ocupa un lugar destacado. Está magníficamente conservada
y no ha sufrido grandes modificaciones. Sobre el altar unas pinturas
del siglo XVI muestran a Dios sujetando a Cristo crucificado sobre un
cielo estrellado. Están presente los símbolos de los cuatro
evangelistas. Un sol y una luna están representados en el arco de
herradura. Una orla de vegetales recorre la pequeña estancia. Todo
el conjunto es sencillamente maravilloso. Da sensación de paz y al
mismo tiempo tiene algo de misterioso. Aquí se nota el paso de los
siglos, de la historia. Es una de las iglesias más bonitas que hemos
tenido ocasión de ver, a pesar de su austeridad.
Queremos desde aquí
dar las gracias y mostrar nuestra más sincera admiración a
Marisefa, una vecina que es la encargada de enseñar esta joya a todo
aquel que se acerca hasta allí. Lo hace por voluntad propia y de
hecho ella es en gran parte responsable de que este templo se encuentre en
las condiciones que está hoy, porque según nos contó estaba
prácticamente abandonado y cubierto de maleza hace unos años. Su
empeño para que la iglesia no se deteriorara hace que hoy podamos
verla y disfrutar de uno de los monumentos más importantes de toda
Galicia.
Muy ilustrativo el comentario y la fotos aparecen como grandes auxiliares de los que decís. Muchas gracias.
ResponderEliminarGracias por tus palabras Emilio. A nuestro entender, se trata de una importante iglesia que no recibe de las administraciones el reconocimiento que debería tener. ¡Un saludo!
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