Burela se celebra la procesión
marítima de la Virgen del Carmen antes de lo que marca el calendario
oficial, porque para entonces la mayoría de su flota pesquera está
en plena campaña del bonito. Así que antes de partir para la
captura de tan preciado manjar, se honra a la patrona de los
marineros con una misa en el puerto y una procesión por las aguas
del Atlántico. La banda acompañó a la Virgen a su salida de la
nave de las rederas, donde se ofició la misa hasta que la subieron a
bordo del pesquero engalanado que debía portarla. Una vez allí,
empezó un desfile de embarcaciones que seguían a su preciada
patrona hasta alta mar para hacer allí una ofrenda floral. Después,
vuelta a puerto para ser recibida con cohetes y la devoción de los
cientos de personas que presenciaron todo el acontecimiento.