Para llegar a Pointe du Raff hay que
dejar el coche en un aparcamiento situado a un kilómetro y bastante
caro, por cierto. Allí nos recibe un centro de información
turística y numerosas tiendas y crêperies. A partir de ahí un
sendero nos acerca hasta la formación en forma de proa que se ha
echo icónica debido al faro de La Viellie que se alza en un islote
justo enfrente. El paisaje es espectacular, y los visitantes muchos.
Es uno de los lugares más famosos de la Bretaña y la verdad es que
es muy Para llegar a Pointe du Raf hay que dejar el coche en un
aparcamiento situado a 1 km y bastante bonito. Hay que decir que a
los gallegos tampoco nos va a dejar especialmente impresionados, pues
consideramos que algunas de nuestras costas son tan bonitas o incluso
más que esta. Pero es indudable que merece la pena. Desde allí se
puede ver el Pointe du Van, otra punta rocosa en la que destaca la
capilla de Saint-They. El entorno está salpicado de matorral bajo y
la herba de namorar lo alfombra todo. Pequeñas fuentes con figuras
de la virgen se encuentran aquí y allá dando un encanto especial a
la zona.
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