Situado en un promontorio a mas de 700
metros de altura se alza majestuoso Castromao, una fortaleza de la Edad de Hierro. Gracias a los hallazgos realizados, se sabe que
estuvo habitado desde el siglo V o IV antes de Cristo, hasta el siglo
II de nuestra era.
Rodeado con una gran muralla tiene unos
20,000 metros cuadrados de terreno y una fuerte pendiente por todas
sus caras.
Dentro podemos ver los restos de las
antiguas viviendas, en su mayoría redondas aunque también vemos
algunas rectangulares.
Desde aquí arriba la vista es
impresionante y están claros los motivos por los que eligieron este
enclave para vivir.
Son numerosos los hallazgos de
cerámica, monedas y arte en piedra como trísqueles o aras votivas,
pero sin duda la pieza que hace de este yacimiento uno de los mas
importantes del Noroeste peninsular es una Tessera Hospitalis,
una pieza de bronce que recoge el pacto de amistad entre los
Coelerni, la tribu que habitaba el castro y G. Antonius Aquilus ,
prefecto de la primera cohorte de los celtíberos en representación
de los cónsules G. Iulius Serius y G. Trebius Sergianus.
Se trata de un
acuerdo que ha perdurado con el paso de los siglos, al igual que este
magnífico poblado donde podemos sentirnos, por unos momentos, como
un Coelerni más, oteando la comarca para vigilar la llegada de
posibles enemigos.
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