La Colegiata de San Pedro de Cervatos
es uno de los monumentos más visitados de Cantabria y eelo se debe
en gran parte a sus famosos canecillos de índole erotica. Aunque no
es raro encontrar este tipo de tallas en muchas iglesisas, aquí en
Cervatos constituyen gran parte de la iconografía del templo.
Imágenes totalmente explícitas de lujuria y pecado que debían de
resultar muy impresionantes para los feligreses de siglos pasados. Es
posiblemente el mejor ejemplo de este tipo de representación en el
románico de toda la península.
Es de una sola nave con ábside y
portada, con hermosos relieves vegetales y temas bíblicos como Adán
y Eva o San Miguel Arcángel. Declarada Monumento Nacional en 1931 es
de obligada visita. Nosotros no pudimos ver el interior ya que estaba
cerrada, pero aún así todo el conjunto exterior la convierten en
una de las iglesias más bellas de toda Cantabria.
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