“Tú que dispones de viento y mar
y
haces la calma y la tempestad
ten de nosotros señor piedad,
piedad
señor, señor piedad”
Ésta es la oración nocturna con la que
los marineros del Juan Sebastián Elcano se encomiendan para surcar
los mares bajo la protección divina.
Hoy atracó en Ferrol el famoso buque
escuela español y durante todo el día ha podido ser visitado por
todo el que se acercó hasta el arsenal militar. Mañana sábado aún
puede subirse a bordo de 10:00 a 13:00 horas.
Un guardia marina nos acompaño durante
la visita y nos mostró las cuatro zonas de cubierta: toldilla,
alcázar,combés y castillo.
Bajo el enorme palo mayor del arco, de
nombre “Asturias”, puedes apreciar las enormes dimensiones de
este espectacular bergantín-goleta de cuatro palos, que en sus ya
casi 86 años (fue botado el 5 de marzo de 1927 ) ha navegado por
todo el mundo formando a los futuros oficiales de la armada.
Debe su nombre al insigne marino de
Guetaria (Guipúzcoa) que partió en una expedición de cinco naves
buscando una nueva ruta hacia la isla de las especias. Las
calamidades se cebaron con la expedición, e incluso Magallanes, al
mando de ésta, murió en la travesía. Después de tres años, sólo la
nao Victoria, al mando de Elcano, llegó a España después de haber
dado la vuelta al mundo por primera vez en la historia.
MARINERO DE OLAS BLANCAS
ResponderEliminarMarinero con aguas de olas blancas
sin lindes ni fronteras a los sueños.
Las hazañas no acotan a tus barcas,
ni en verdes llanos de mares de ensueños,
ni en las tormentas que con el rumbo abarcas.
Alzas tus velas por los mil senderos,
siguiendo sinfín de amaneceres
con regio timón, como rey que eres.
Navegas por las sombras de tu sueño,
y, de frente, las aborda el velero
despejando los mares con empeño;
siempre en la lucha eres prisionero.
… Y de los mares auténtico dueño
hasta que en el puerto muere tu sendero.
Descansa ya en tu casa, marinero,
que la mar siempre te dirá: te espero.
Antonio Puertas.
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Bonitas palabras que navegan por un hermoso poema. Gracias por compartirlas,Antonio. ¡Un abrazo!
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