En pleno camino francés a Santiago y a
orillas del Miño se levanta Portomarín. Aunque tiene una larga
historia, el pueblo se alzó de nuevo cuando en 1962 se construyó el
embalse de Belesar. El pueblo se trasladó entonces al Monte do
Cristo, apenas unos cientos de metros más arriba. Las construcciones
más importantes fueron desmontadas y reubicadas en su nuevo
emplazamiento.
Destaca la impresionante Iglesia de San
Nicolás, románica y fundada por la Orden de San Juan de Jerusalén.
Aún hoy pueden verse en muchas de sus piedras los números con que
fueron marcadas para su posterior reconstrucción.
Bajo el puente que cruza el río Miño,
si es época de sequía y el nivel de las aguas bajo, pueden verse los
restos del antiguo pueblo. Si el nivel es muy bajo hasta se puede
caminar entre las ruinas sumergidas la mayor parte del tiempo. En 2007 nosotros pudimos pasear entre los cimientos de las casas,
el lugar donde se levantaba la iglesia, y hasta se podían ver los
restos del antiguo puente romano alrededor del que creció el pueblo.
Restaurado en la Edad Media, hoy permanece bajo las aguas y sólo se
asoma cuando éstas deciden mostrar lo que antiguamente fue
Portomarín.
Ahora se puede pasear por las calles
del nuevo trazado, pero siempre se tiene presente que el original
yace unos metros más abajo en las profundidades del Miño.
Y aquí os dejamos las fotos que hicimos en otoño del 2007, cuando recorrimos el embalse y los restos del antiguo Portomarín :
Antigua ubicación de la iglesia
MUÍÑO DE PORTOCELO
ResponderEliminarAdoecen as augas ó moelo trigo,
e pola cima dun piñeiro escorna o peto
mentres troca un ovo o cuquiño lareto,
e o merliño suplica alongando o fuciño.
Alborota a pega que acanea co rabo
e lisca arreitada a vella raposa,
anegada de orballo; esvaece fogosa
entre fieitos, arredando o espiño.
Nas augas bailan os cores dos ameneiros
e danzan as verzas ateigadas de liños;
xabrean na canle agurgullantes armiños,
e, deitados, enfurnan salgueiros penitentes.
Silvas e toxos asoballan carballeiras,
ramallos de flores pintan amoreados:
marelos e lilas, rifando mesturados
… píntegas e ras, e chairas dormentes.
Estoupan as augas no inferno
e xordo canta o rodicio fariñeiro;
espile a fariña e brinca o muiñeiro,
envorca o saco e ronca o tarabelo.
Fozan as augas alporizadas,
e o maquieiro rifa co labrego,
e calan as sombras na noite de sosego…
¡ como canta e como baila o muíño de Portocelo !
…que, se non houbo muíño, debería habelo.
Antonio Puertas.
Tódolos dereiros reservados
Estoupan as augas no inferno e xordo canta o rodicio fariñeiro;
EliminarMe encanta esta parte!!
Gracias por dejarnos tu arte.
Un saludo, Antonio.
que bonito es Lugo!
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