Uno de los pueblos más bonitos del
norte de Navarra es Etxalar. Rodeado de prados y montañas, pasear
por sus calles es un placer. Sus caseríos están muy bien
conservados y los balcones y ventanas inundados de flores crean una
imagen de postal. El río Tximista atraviesa el pueblo en su parte
baja, para acabar desembocando finalmente en el Bidasoa. Este bello
pueblo ha recibido el premio nacional de turismo por su excelente
conservación. A los pies de la Iglesia de la Asunción se extiende
un cementerio de los más bellos que hemos visto, con decenas de estelas
funerarias de piedra tallada con los apellidos de las casas del
pueblo y diversos símbolos. El conjunto de la iglesia de piedra
rojiza con el jardín lleno de estelas tiene una disposición hermosa
y misteriosa a un tiempo. Sentados en la pequeña terraza de un bar,
al lado de la iglesia y desde donde veíamos como jugaban en el
frontón, disfrutamos de la tranquilidad de este precioso pueblo de
la comarca de las Cinco Villas.
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